Los espacios verdes mejoran la función inmune
Existe una terapia japonesa llamada “baño de bosque” que consiste en pasar mucho tiempo con la naturaleza (por lo general entre los bosques, por eso el nombre) lo cual incrementa la función inmune. Las células asesinas (células NK) impiden que el sistema inmune innato funcione de forma apropiada; una de sus funciones importantes es eliminar tumores. Por lo tanto, con solo un día de viaje al parque se puede incrementar el número y la actividad de las células NK, así como también regular el alza de proteínas anticancerígenas, hasta por una semana completa. En cada estudio de “baño de bosque, de hecho, los participantes disfrutaron del aumento de actividad y función de protección anticancerígenas de las células asesinas (células NK).
Los espacios verdes reducen el estrés
Si siempre estás estresado y no hay nada que puede remediar el problema, lo recomendable es dar un paseo al parque o salir a caminar. No necesariamente tiene que ser un paseo muy largo, ni muy corto. Puede ser durante días aleatorios, pero funciona. Esto permite eliminar la respuesta de estrés, tener un manejo del propio sistema nervioso simpático y de forma tranquila determinar la fuente del estrés. De modo que los departamentos con áreas verdes están asociados con niveles de cortisol más saludables.
Los espacios verdes mejoran la salud mental
Tendemos a enfocarnos en la salud física, pero la salud mental (la cual está también relacionada a la salud física) posiblemente depende más de la exposición regular a espacios verdes. Los vecindarios con altos niveles de espacio verde están de forma congruente relacionados a los bajos niveles de ansiedad, depresión y estrés, ten en cuenta que las personas que se mudan a un vecindario “más verde” disfrutan de una mejora en la salud mental en los años siguientes en comparación con las personas que viven en vecindarios “menos verdes”.
Los espacios verdes disminuyen la presión sanguínea
Una caminata por el parque o bosque durante una semana puede reducir la hipertensión en personas mayores, mientras que hacer lo mismo en la ciudad no trasmite los mismos beneficios. Estudios indican que en niños de 10 años que viven en áreas urbanas y tienen bajos niveles de cercanía a espacios verdes están asociados a una alta presión sanguínea. La presión sanguínea de ninguna persona es inmune a la falta de espacios verdes, y los niños pueden ser incluso más susceptibles a ella.
Los espacios verdes promueven la actividad física y el ejercicio pues lo hace más agradable.
A las personas les agrada trabajar rodeado de naturaleza. Prefieren caminar por un parque en lugar de ir por la aburrida ciudad. Les gusta subir montañas en lugar de subirse a la cinta de correr. Cuanto más nos encontramos cerca a espacios verdes, mayor son las posibilidades de ser activos físicamente. Mucho más aún, los espacios verdes promueven un tipo preciso de actividad física, que en la actualidad nos falta a muchos practicar: el caminar.
Los espacios verdes reducen el nivel de glucosa
Las personas diabéticas que hacen viajes de “baños de bosque” disfrutan de la disminución de azúcar en su sangre y mejoran el HbA1c. Por ejemplo, un estudio en Australia reveló que las personas que viven cerca a espacios verdes estuvieron de forma independiente asociadas a un bajo riesgo de padecer diabetes tipo 2. Esto fue sin tener control de la demografía, nivel de ingreso, dieta, nivel de actividad, cultura o salud.
Los espacios verdes mejoran el sueño
Cuando vamos a acampar, nuestro sueño usualmente mejora y en lugar de quedarnos despiertos pasada la media noche, nos da ganas de acostarnos a dormir apenas se hace oscuro y nos despertamos renovados como nunca antes. La disminución de luz artificial permite a nuestro ritmo cicardiano natural dictar sus hábitos de sueño. Ciertamente, esto influye de manera significativa, pero ¿qué pasa si la presencia de espacios verdes también incluye en dicha acción? Un estudio reciente encontró evidencia de tal efecto, con habitantes de ciudades que viven cerca a espacios verdes, los cuales reportaron hábitos saludables de sueño.
Los espacios verdes son importantes para los niños
Los niños ya lo saben. Los llevas al bosque o al parque y saben exactamente lo que tienen que hacer. Ellos corren, saltan, suben a los árboles, buscan insectos, se ensucian, recogen hojas, inventan juegos y exhiben una gran sonrisa en su rostro. Esto es razón suficiente para proporcionar a los niños un amplio y diario acceso a espacios verdes. Asimismo, existen pruebas que indican los beneficios fisiológicos y mentales para ellos, que incluye: aumento en los resultados de pruebas en niños “naturalmente inteligentes”, mejora en la autodisciplina y autocontrol, mejora en la función cognitiva y la concentración, reducción de estrés en niños estresados. Mientras que los niños con poco acceso a espacios exteriores son más propensos a tener problemas de conducta.
Tomando esto en cuenta, no hay excusa para siempre mantenernos en contacto con la naturaleza y qué mejor vivir cerca a un parque u otra área verde. Por tal motivo, Inmobiliaria CMG pensando en ello, te animamos a comprar un departamento en Salamanca, un distrito que no solo te ofrece comercio y diversión, sino cercanía a diversas áreas verde, te ofrecemos la oportunidad no solo de vivir en un buen distrito sino también está ubicado frente al parque, lo cual permitirá a ti y a tu familia o compañero de cuarto a mantenerse cerca a la naturaleza y siempre activos pero sin alejarse de las comodidades y accesibilidad de la ciudad.